Inauguramos promesas y fútbol hablando, como no podía de otra manera, de los dos gigantes del fútbol español y posiblemente mundial, a pesar de la reciente eliminación de ambos en la Champions League, el F.C. Barcelona y el Real Madrid.
Esta temporada, al igual que la pasada, ambos clubes han quedado a las puertas de la soñada final Wembley, objetivo real de ambos equipos durante el año. No han bastado las enormes inversiones económicas ni jugar la vuelta en casa, los alemanes se han comido a nuestros gigantes casi sin pestañear.
Esto hace que uno se plantee si se está haciendo un buen trabajo en ambos clubes. Tienen todo lo que cualquier otro podría desear, pero parece que si Messi o Crisitano cogen un pequeño catarro todo se viene abajo. Se puede pensar que llegar a semifinales de la máxima competición europea es una hazaña de mérito ya de por sí, pero estos clubes no tienen suficiente con los campeonatos domésticos que siguen y seguirán repartiéndose durante unos cuantos años más a no ser que cambie de forma drástica el reparto de los derechos televisivos, cosa que no parece probable.
El caso es que el que uno gane la Liga y otro la Copa del Rey (si ambos lo acaban haciendo) deja a ambos como perdedores de la temporada ya que nada de eso se puede comparar con La Champions. El Madrid cayó con honor y el Barcelona con humillación, pero no importa, lo que cuenta es que ninguno se proclamará Rey de Europa. Ambos se quedan en príncipes, demasiado poco.
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